Hoy quería hacer una reflexión acerca de la igualdad pero sobre todo de la desigualdad. Como es habitual cuando analizo un tema, siempre me fijo en la connotación positiva o negativa que tiene la palabra. Esta connotación normalmente no es casual, mas bien viene siendo una carga que se le va dando con cierta intencionalidad.
El valor de la igualdad esta muy bien visto y desde un punto de vista liberal la igualdad ante la ley es deseable y se debe cumplir sin ningún tipo de excepción. Sin embargo, no toda igualdad es deseable.
Igualdad es sinónimo de uniformidad y homogeneidad, desigualdad es sinónimo de pluralidad y diversidad.
Es importante no confundir igualdad con desarrollo. Una sociedad puede ser muy igualitaria y ser tremendamente pobre, un claro ejemplo de esto podría ser Cuba o Venezuela. Por el contrario, una sociedad puede ser muy desigual y ser una sociedad con un gran nivel de riqueza y desarrollo como por ejemplo Singapur. La persona mas pobre de Singapur será mucho mas rica que la persona mas pobre de Venezuela, por lo que se deduce que la desigualdad en la riqueza no es necesariamente negativo per se.
El ser humano posee un sesgo cognitivo de preferir la igualdad a la desigualdad de manera irracional. La sociedad tiende a pensar que es mejor que todos seamos iguales aunque sea en la pobreza a que exista desigualdad y haya personas mas ricas y otras mas pobres.
La igualdad en cuanto a los resultados del proceso de la interacción social es un valor negativo que tiende a limitar las capacidades de creación de riqueza de ciertas personas para favorecer a otras.
Cuando hablo de características me refiero a habilidades físicas o psíquicas que consiguen que una persona consiga un cierto existo o riqueza.
Vamos a exponer algunos ejemplos, imaginen que yo fuera un empresario emprendedor que localiza un nicho de mercado que no esta ocupado y fabrico un plan de negocio, invierto mi esfuerzo, tiempo y capital en llevar a cabo ese plan y finalmente llega la recompensa en forma de un gran beneficio económico.
Ahora imaginen que por lotería genética tengo un cuerpo muy atlético y además de esto hago un gran sacrificio entrenando y adecuando una dieta estricta consigo ganar un mundial de futbol y el balón de oro.
Hay muchos mas ejemplos de desigualdades, observen a presentadores de televisión, modelos, etc. Tienen ciertos rasgos, características, habilidades que los hacen diferentes a otras personas, y no solo esto, además esas otras personas, por mucho que trabajasen para ser igual que las personas de los ejemplos, nunca lo conseguirían.
En cualquier caso deberían pagar la misma cantidad que cualquier otra persona, o el mensaje que enviaría el Estado es que se penalizará la posesión de habilidades y esfuerzo para crear riqueza, lo cual incentiva negativamente la creación de la misma.
Con esto no quiero decir que las sociedades no deban cooperar entre ellas, pero si la finalidad de los impuestos es la igualdad, no deberían pagar impuestos solo los mas ricos y entregárselos a los mas pobres para que pudieran prosperar?
Hoy en día nos encontramos Estados mastodónticos en los cuales, los ricos, los pobres y la clase media pagan impuestos, y en concreto la clase media es la que soporta la mayor parte de la carga impositiva.
Con la excusa de conseguir la igualdad, somos sociedades clientes de un sistema burocratizado en el cual el Estado mediante la imposición de violencia institucional y coacción, busca expandirse y perpetuarse para vivir de sus clientes.
"El hambre y la sed te llevan a nuevos lugares"
@jotaliberty
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